Durante 2020 y 2021 los eventos presenciales se aplazaron por causa de la emergencia sanitaria en el mundo. Y el Mundial de Robótica no fue la excepción. 

Este espacio, que alberga diferentes iniciativas académicas relacionadas con el desarrollo de software e inteligencia artificial, abrió sus puertas nuevamente para que estudiantes de diferentes universidades del mundo midieran su conocimiento en este campo de la informática. 

Para los estudiantes de la Facultad de Ingeniería de Los Andes, que hacen parte del Grupo de robótica social e inteligencia artificial de la Universidad de Los Andes -SinfonIA, era un sueño hacer parte de esta experiencia. Fue así, como en octubre de 2021, recibieron la noticia de que el evento volvería a realizarse en julio de 2022.

Así comenzó la travesía de Juan José García, ingeniero eléctrico y electrónico de la Universidad de los Andes, quien lideró al equipo en el continente asiático.
 
“La pasión por la robótica y la Inteligencia Artificial fueron los motores de este grupo multidisciplinar”, dice orgulloso el magíster en Ingeniería Electrónica y de Computadores, que 'se puso la 10' por este proyecto y aplicó las ideas desarrolladas en las aulas de clase para presentarlas ante sus competidores. 

El ingeniero García, profesor e instructor del Departamento de Ingeniería Eléctrica y Electrónica, explica que para poder participar existen federaciones por país conformadas por expertos en robótica. Sin embargo, Colombia es uno de los países que no cuenta con esta modalidad, por lo cual enviaron su aplicación de manera independiente en diciembre de 2021 y lograron un cupo entre más de 4 mil equipos participantes. 

Con el apoyo de la Universidad, y a través de donaciones, patrocinios y una recolecta virtual, se levantaron los recursos para montarse en un avión con destino a Bangkok, Tailandia, en donde se realizó el evento más importante de robótica. 

La categoría, Robocup@Home. La especialidad: resolver tareas domésticas de forma independiente a través de la interacción humano-robot.

Por esta razón, un mes antes, el equipo se preparó y practicó los retos a los que se iba a enfrentar. Uno de estos, mostrar cómo el robot puede ser el anfitrión de una fiesta y presentar a los invitados para direccionarlos de manera autónoma. 

Durante casi una semana de pruebas y experimentos, así como de la inspección hecha por los jurados, el equipo uniandino llegó a la final y obtuvo el segundo lugar. El grupo de Francia se llevó el título.  

Este logro uniandino es, sin duda, un peldaño más para los miembros del grupo SinfonIA. Esta experiencia les permitió a estos apasionados por la robótica integrar diferentes visiones y abrir puertas a nivel laboral. Hoy encabezan un proyecto con el Hospital Militar que propone que un robot funcione como acompañante de pacientes en unidades de cuidado intensivo.


"Esta experiencia la defino como un reto donde desafiamos nuestras habilidades. Como grupo avanzamos en el desarrollo y aprendimos a aplicarlo en la competencia y fuera de ella", concluye Susana Marcela Chávez Leyton, estudiante de la maestría en Ingeniería Electrónica y de Computadores e integrante del equipo.

 

Escrito por:

Ana Maria Forero Perez