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Hay que seguir fomentando valores desde la academia

Promover y replicar valores humanos desde la academia permite construir una mejor sociedad. Semana de la Integridad en Uniandes.
Corrupción
Integridad
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Promover y replicar valores humanos desde la academia permite construir una mejor sociedad.

En una sociedad con valores humanos etéreos, el fraude y la corrupción aparecen como trampas que atentan contra la integridad.

Colombia ha sido calificado como un país fragmentado, en donde la corrupción, los malos manejos de recursos públicos, la violencia y la polarización política se han convertido en actos de la cotidianidad. De hecho es considerado uno de los países más corruptos del mundo, según la Agencia Internacional de Transparencia, que estima que este fenómeno puede alcanzar el 5 % del PIB.

Para Juny Montoya, directora del Centro de Ética de la Universidad de los Andes, “El fraude es un problema grave de la sociedad que afecta las bases del capital social como la confianza mutua y la efectividad de las normas”.

Pero, ¿cómo podemos combatir las faltas contra la integridad?

En este contexto, atacar el problema desde distintos escenarios es clave para la construcción de una sociedad con valores.

Los estudiantes, por ejemplo, pasan gran parte de su tiempo en sus instituciones educativas, lo que puede convertir las aulas de clase en el lugar idóneo para fomentar la integridad, la honestidad y la transparencia, entre otros. Además, en la academia el manejo de datos, el diseño de encuestas, el ejercicio de investigar o crear, son labores que les implica tanto a estudiantes como a profesores actuar desde la moralidad y la ética.

Juan Camilo Cárdenas, profesor de la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes, menciona cómo en nuestro país la industria farmacéutica de opioides hace un uso irresponsable en pacientes vulnerables, causando dependencia y poco control sobre estos medicamentos.

Por otra parte, el experto en economía del comportamiento, critica tajante una idea de negocio digital (presentada en una exitosa serie de televisión que impulsa y promueve nuevos emprendimientos) cuyo producto final es la realización de trabajos y tareas a estudiantes de colegios y universidades.

La discusión ética y moral no se hizo esperar. Los evaluadores del emprendimiento no aprobaron la idea.

Sin embargo, tuvo tanto impacto que Forbes Colombia publica en agosto de 2021 una noticia sobre el lucrativo negocio de Natalia Antonoff: "Hoy con 30 años, lidera una empresa amada por unos y odiada por otros. Que tocó la cumbre de la popularidad a su paso por Shark Tank México, programa del que salió sin socios, pero sí con el respaldo del público", se lee en el artículo 'Homework Dealer: el profesional de las tareas… a su servicio'

Lo sorprendente del caso fue ver cómo la empresaria defiende su proyecto en el programa de televisión, a tal punto que lo denomina, sin sonrojarse, “amoral”, evidenciando un desentendimiento moral y normalizando su comportamiento. "Es fomentar la corrupción, la mentira y la trampa en este país", le dijo uno de los jurados mexicanos a Antonoff.

En este caso, Cárdenas expresa que “si se normalizan los atajos, se erosiona la norma social de integridad, fomentando un círculo vicioso donde se hace un daño irreversible a los principios y valores de la sociedad donde preocupa la sanción y no la integridad al actuar".

Es ahí en donde las instituciones educativas juegan un papel fundamental, pues deben fortalecerse como el espacio que vela por la confianza académica y la formación de estudiantes íntegros, teniendo como base la honestidad, la responsabilidad social y el desarrollo personal, características humanas que ayudan a construir herramientas sólidas que no faciliten una desconexión moral entre los jóvenes.

Semana de la Integridad en Uniandes

Con el propósito de ampliar el debate, la Universidad de los Andes en alianza con el Instituto Nacional de Investigación en la prevención del Fraude (INIF), realiza la Semana de la Integridad. En esta oportunidad, el evento tuvo conferencias, conversatorios y charlas lideradas por diferentes expertos donde se discutieron conceptos como la cultura de la honestidad, la justicia restaurativa y contributiva, la corrupción, el fraude y la ética pública en el marco universitario. Además, se realizó una twitteraton abierta al público así como un concurso de fotografía donde se buscaba retratar el concepto de integridad.

El evento tuvo un cierre musical, acompañado de un concierto de piano y violín interpretados por la cubana Beatriz Batista y Leonardo Federico Hoyos respectivamente.

Para revivir el concierto virtual de cierre puede hacer clic aquí.