Diego Pradilla continúa en la dirección del Departamento de Ingeniería Química y de Alimentos
La Rectoría aprobó la renovación del nombramiento del ingeniero químico como director del Departamento de Ingeniería Química y de Alimentos, por un período de dos años, a partir del 10 de enero de 2025.La Rectoría aprobó la renovación de Diego Pradilla Ragua, como director del Departamento de Ingeniería Química y de Alimentos, por dos años, a partir del 10 de enero de 2025.
Diego Pradilla cuenta con un doctorado en Ingeniería Química en la Norges Teknisk-naturvitenskapelige Universitet (Trondheim, Noruega). Es ingeniero químico egresado de la Universidad de los Andes, institución de la cual obtuvo una maestría en este mismo campo del conocimiento y en la que se ha desempeñado como profesor de la Facultad de Ingeniería e investigador senior (MinCiencias) del Grupo de Diseño de Productos y Procesos (categoría A1).
Ha estado vinculado con diferentes sectores energéticos (descarbonización, transición energética y aseguramiento del flujo), de alimentos, cosmético, farmacéutico y biotecnológico a través de sus líneas de investigación, docencia y formación de estudiantes. Es miembro activo del American Institute of Chemical Engineers (AIChE) y de la Society of Petroleum Engineers (SPE), desde donde impulsa actividades de divulgación científica y académica.
“La ingeniería química es una de las carreras con más versatilidad por el sinfín de roles que se pueden ejercer en diferentes industrias”.
Como director del Departamento de Ingeniería Química y de Alimentos, su visión se centra en los siguientes pilares:
• Fomentar innovación y emprendimiento contextualizado, enfocado en generar alto valor agregado.
• Promover la educación y la pedagogía, alineadas con las nuevas tendencias en enseñanza y aprendizaje.
• Impulsar la investigación aplicada, diseñada para aprovechar y maximizar las particularidades y el potencial de nuestro país.
Durante su gestión, el currículo de los programas de pregrado y posgrado del Departamento ha sido actualizado para responder a las dinámicas y tendencias globales. Se han implementado, por ejemplo, dos nuevos programas de posgrado en áreas de gestión energética y gerencia de la ingeniería. Además, se ha fortalecido el vínculo con el sector empresarial a través de alianzas estratégicas y que ofrecen a los estudiantes la oportunidad de abordar retos auténticos de la industria como parte de sus proyectos de grado.
La investigación aplicada ha sido clave con proyectos de impacto en diversas regiones del país y financiados por el Sistema General de Regalías (SGR) y MinCiencias. Estas iniciativas han logrado conectar a actores diversos, como alcaldías, gobernaciones, juntas locales, asociaciones de productores, líderes comunitarios, investigadores y estudiantes, para generar soluciones de alto impacto que transforman vidas. Asimismo, el fortalecimiento de las redes de egresados ha sido esencial para consolidar la comunidad uniandina y promover el apasionante campo de la ingeniería química.
Concluye que los retos más importantes para los próximos dos años serán fortalecer la incorporación de la transformación digital; continuar divulgando a través de experiencias tangibles la versatilidad y multifacética naturaleza de la ingeniería química, así como las oportunidades que ofrece Colombia para esta disciplina; fomentar el bienestar y el éxito de los estudiantes; y liderar la construcción y el fortalecimiento de programas y contenidos académicos que respondan a las realidades nacionales e internacionales.