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No le tiembla la mano

La Asociación Colombiana de Ingeniería Sísmica (AIS) ha sido encargada de crear y actualizar el Reglamento Colombiano de Construcción Sismo Resistente en Colombia.
AIS
Asociación Colombiana de Inge…
Alberto Sarria
Juan Francisco Correal
Luis Enrique García
En el quinto piso del bloque W de la Universidad de los Andes, cerca de 40 ingenieros se reunieron el 6 de diciembre de 1974 con el ánimo de darle los cimientos definitivos a un proyecto que buscaba evitar hasta donde fuera posible los desastres que podrían derivarse de los movimientos telúricos en Colombia. En aquella reunión, liderada por los ingenieros Alberto Sarria Molina y Luis Enrique García, se fundó la Asociación Colombiana de Ingeniería Sísmica (AIS), entidad encargada de construir la normatividad sísmica en el país.

Sarria y García, profesores de ingeniería civil de Los Andes, tradujeron al español un documento sobre sismología de la Asociación de Ingenieros Estructurales de California (SEAOC), titulado “Recomended Lateral Force Requirements and Commentary”, y afianzaron vínculos con ingenieros sísmicos estadounidenses para adaptar el código ATC-3-06 de 1978, Disposiciones tentativas para desarrollar códigos sísmicos para edificios (en español), que serviría de modelo en otros países latinoamericanos. “Era un documento desarrollado por la Applied Technology Council, en el cual se fijaban reglas para hacer códigos modernos de sismorresistencia”, cuenta García, profesor de la Facultad de Ingeniería.

A finales de los setenta, tras el terremoto de Tumaco y el del Eje Cafetero, en 1979, el Estado vio la necesidad de diseñar una serie de normas que guiaran el trabajo de ingenieros y constructores para evitar nuevos colapsos. Dichos documentos, el ATC-3-06 y el de la SEAOC, fueron las columnas de su adaptación local, el AIS-100- 81, Requisitos Sísmicos para Edificios, de 1981, el primer esbozo de un código nacional de sismorresistencia para construcciones.

La lección de Popayán

Mientras la AIS impulsaba el estudio científico y el mejoramiento de las técnicas en ingeniería sísmica, una nueva catástrofe natural sacudió a los colombianos. En 1983, un sismo de magnitud 5,5 en la escala de Richter terminó con la vida de cientos de personas y desmoronó gran parte de las viviendas en la ciudad de Popayán.

Este trágico episodio alertó nuevamente al Gobierno, que optó por crear la Ley 11 de 1983, en la cual, además de otorgar apoyo a las víctimas, ordenó un código nacional de sismorresistencia, misión que le fue delegada a la AIS. El proyecto de estos dos pioneros de la ingeniería sísmica nacional terminó con el decreto 1400 del 7 de junio de 1984, firmado por el presidente Belisario Betancur: el Código Colombiano de Construcciones Sismo Resistentes (CCCSR-84), que amplió el alcance de la AIS-100-81 y determinó su uso obligatorio.

La AIS ha sido encargada de diseñar, modificar y actualizar el Reglamento Colombiano de Construcción Sismo Resistente, incluido el que ahora prepara para ser implementado por el Gobierno en 2019.

A prueba de carga

El trabajo en sismorresistencia ha sido fundamental en los proyectos de infraestructura que no solo tienen que ver con edificaciones. La AIS actualizó, en 2014, el Código Colombiano de Diseño Sísmico de Puentes, elaborado por el Instituto Nacional de Vías (Invías) en 1995. “Hicimos una actualización a la mejor versión normativa internacional que existe”, asegura el ingeniero Juan Francisco Correal, profesor del Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental de la Universidad de los Andes y actual presidente de la AIS.

La entidad trabaja en una nueva actualización del código de puentes y en un documento técnico para realizar pruebas de cargas en puentes. Aunque la AIS se independizó de la Universidad de los Andes un año después de su fundación, el vínculo entre ambas se ha mantenido a lo largo de 44 años. Gracias a la inversión de equipos de la Facultad de Ingeniería se adquirió la mesa vibratoria del Laboratorio de Modelos Estructurales Alberto Sarria Molina –un simulador desarrollado para reproducir sismos de diferentes magnitudes sobre estructuras–, en donde expertos del Centro de Investigación en Materiales y Obras Civiles CIMOC encomendados por la AIS realizaron estudios técnicos para prevenir el colapso del patrimonio arquitectónico del Centro Histórico de Bogotá, en caso de sismo.

Los resultados quedaron en el documento “AIS 610-EP-17: Evaluación e intervención de edificaciones patrimoniales de uno y dos pisos de adobe y tapia pisada”, realizado para la Dirección de Patrimonio del Ministerio de Cultura y el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural, en el cual se establecieron medidas de rehabilitación y recomendaciones vitales para la conservación y preservación no solo del patrimonio arquitectónico de la capital sino de ciudades antiguas como Popayán y de los otros 17 pueblos patrimonio de Colombia.

Este es uno de los hitos que ha marcado la historia de la Universidad de los Andes y que han contribuido al desarrollo del país.

Para conocer otros hitos importantes en estos 70 años de historia, haga clic aquí.