Mónica Contreras Esper, presidenta de Transportadora de Gas Internacional (TGI), es una figura destacada en el ámbito empresarial colombiano. Con una carrera marcada por roles significativos, su historia es un testimonio de disciplina, compromiso y un propósito claro. Su formación en la Universidad de los Andes y su experiencia laboral la han convertido en una líder influyente, capaz de transformar sectores y dejar un legado significativo en cada paso de su trayectoria. En esta entrevista exclusiva, compartió su experiencia y reflexiones sobre su trayectoria profesional y el impacto de su formación académica.
Comenzó su carrera como economista de la Universidad Externado de Colombia, vinculándose al mundo laboral desde joven. Años más tarde, decidió potenciar su carrera con un MBA Ejecutivo en la Universidad de los Andes. Esta decisión, impulsada tanto por razones académicas como personales, marcó un punto estratégico en su vida profesional. "Después de construir una experiencia profesional desde joven, descubrí en el Executive MBA un programa de tiempo completo y dedicación exclusiva. El obtener una visión renovada del mundo empresarial y de la microeconomía fue algo que me atrajo profundamente. Al evaluar opciones, encontré que este programa ofrecía el pénsum académico más completo y la dedicación de tiempo ideal para capitalizar las experiencias compartidas con compañeros. Aunque consideré la posibilidad de estudiar en el extranjero, mi compromiso con mi esposo, entonces novio, fue determinante en mi decisión de quedarme en Colombia y elegir Los Andes", recuerda Mónica sobre la decisión de estudiar en la Universidad.
El impacto de su formación en Los Andes se refleja en su enfoque disciplinado y en su capacidad para adaptarse a contextos empresariales cambiantes. Mónica enfatiza que la experiencia adquirida en la Universidad, la interacción con líderes empresariales colombianos, y la influencia de profesores que enriquecieron su formación y perspectiva empresarial, fueron fundamentales para desarrollar su estilo de liderazgo transformador. Sobre su experiencia menciona que, “durante el MBA, bajo la dirección de Javier Serrano, experimenté una disciplina que enriqueció significativamente el programa. Además, la presencia de excelentes profesores como Gabriel Pérez en marketing, Julio Villarreal en estrategia y Manuel Rodríguez en sostenibilidad, fue verdaderamente inspiradora. Estudiar de cerca el empresariado colombiano y sus diversos liderazgos me permitió visualizar cómo podría reflejarme en roles clave. Aunque nunca imaginé llegar a ser la CEO que soy hoy, siempre admiré a ciertas personas por sus estilos de liderazgo y conversaciones impactantes, y estas experiencias fueron fundamentales para mi desarrollo personal y profesional”.
Su trayectoria profesional la ha llevado a desempeñarse en sectores como el consumo masivo y energético. En 2020, asumió la presidencia de la Transportadora de Gas Internacional (TGI), donde ha impulsado la expansión del gasoducto hacia Bogotá y la implementación de la hoja de ruta del hidrógeno. Bajo su dirección, TGI se posicionó en el segundo puesto a nivel mundial en la Evaluación de Sostenibilidad Corporativa de S&P Global. Este logro refleja su visión de negocios que no solo busca la rentabilidad, sino también el bienestar social y ambiental, respecto a esto reflexiona, "para mí, propósito significa comprender el ecosistema en el que operas y reconocer el impacto significativo que los líderes tienen en cuestiones sociales y ambientales. Es crucial ser sustentable, tanto a nivel individual como organizacional, para garantizar resultados financieros sostenibles a largo plazo".
El enfrentarse a numerosos desafíos en su carrera, desde liderar procesos complejos hasta adaptarse a nuevos sectores, le ha brindado oportunidades para aprender y crecer. Su transición del consumo masivo a energía fue un reto significativo, y sobre ello destaca la importancia de liderarse a sí mismo para poder liderar a otros: "siempre he puesto pasión y compromiso en todo lo que hago, pero es fundamental que las actividades me gusten y me inspiren. Mi búsqueda siempre ha sido dejar una huella que transforme a las personas, que las impulse a seguir creciendo. Más que simplemente hacer, siempre he buscado impactar. Esto representa la oportunidad de contribuir significativamente a transformar vidas, desempeñándome con propósito en cada tarea. Creo firmemente que esta ha sido la clave principal para llegar donde estoy: trabajar de manera disciplinada, con pasión, compromiso, responsabilidad y con valores éticos inquebrantables".
Para la egresada Uniandina, reconocida por Forbes como una de las Mujeres Poderosas de Colombia en 2024, es fundamental comprender que el acceso a posiciones de liderazgo no ocurre de manera instantánea; requiere la construcción de una carrera sólida y coherente. Es en el contexto laboral y a través de la experiencia práctica diaria, donde se pueden fortalecer y complementar los fundamentos académicos proporcionados por las universidades, con la preparación adecuada para ocupar roles C-level o CEO en cualquier entorno corporativo. “La combinación de ambos aspectos es esencial. Construir una carrera sólida es crucial para ascender a altas posiciones y para desarrollarnos como líderes más competentes, fuertes y robustos. Por eso insisto en que actuar con propósito nos permite resaltar como líderes en un contexto donde hay muchos, pero pocos se destacan. Todos debemos aspirar a dejar un legado significativo en nuestra sociedad y país, tan necesitados de propósito y liderazgo", concluye Mónica, reafirmando su compromiso con el desarrollo empresarial del país, a través de su participación en juntas y directorios, donde busca ayudar al fortaleciendo de Gobiernos Corporativos, impulsar la sostenibilidad de las organizaciones y aumentar la representación de mujeres en mesas directivas.
Para ella, ser parte de la comunidad de Los Andes significa ser parte de un grupo de profesionales dedicados a transformar el mundo y dejar un legado duradero. “Ser Uniandino es conectar con profesionales y amigos orgullosos de lo que hemos construido, inspirados de un profundo sentido de país y un compromiso empresarial hacia el impacto. Los Uniandinos somos actores importantes en la construcción de país, y, por tanto, ser parte de esta historia es motivo de gran orgullo”, reflexiona.
En cada paso de su carrera, Mónica Contreras Esper ha demostrado que el liderazgo auténtico y comprometido puede lograr un impacto significativo y duradero. Su trayectoria y dedicación, junto con su enfoque en la transformación empresarial, son un testimonio inspirador que deja un legado perdurable. Su historia motiva a quienes aspiran a dejar una huella positiva en sus campos profesionales y en la construcción de un país más sostenible.