Museo de la desinformación: un año de noticias falsas en Colombia

Conozca el visualizador de noticias falsas sobre COVID-19 en Colombia, creado por el grupo de investigación COLEV. 

Tomar abundante agua, hacer gárgaras con sal y agua caliente o aplicar ungüentos en la nariz para eliminar la COVID - 19, son algunas de las noticias falsas que han circulado a través de redes sociales, cadenas en WhatsApp y otros sistemas de mensajería que son potencialmente peligrosos debido a la rapidez con la que se viralizan. Un minuto es suficiente para posicionar una duda, un mito, o un factoide ('hecho' completamente falso, e inventado para crear o prolongar la exposición pública o para manipular la opinión pública), tiempo suficiente para iniciar con la configuración de una comunidad que comparte narrativas, discursos y simbolismos que distorsionan la información.  
 
Con una serie de estrategias que articulan metodologías de diseño, macrodatos y aprendizaje de máquinas y con el objetivo de entender qué es la desinformación, cómo son sus dinámicas y cómo afectan el curso de la pandemia actual, un equipo interdisciplinario del grupo de investigación COLEV de la Universidad de los Andes recopiló más de 50 noticias falsas relacionadas con COVID-19 en Colombia, en una plataforma llamada Museo de la desinformación.
 
La primera visualización de datos del Museo se titula “Un año de noticias falsas en Colombia”. Se trata de una aproximación histórica con respecto a la evolución de datos e información errónea durante el último año. La herramienta cuenta con un conjunto de datos a partir de las páginas de los medios encargados de desmentir dichas noticias (con elementos gráficos e interactivos) programada con lenguaje JavaScript.

Visualizador “Un año de noticias falsas en Colombia”  Clic AQUÍ para conocer el visualizador “Un año de noticias falsas en Colombia”

En la visualización se pueden encontrar distintos tipos de información errónea: desinformación, información errónea, información sacada de contexto, información incompleta o sesgada, teoría conspirativa y estafa.

"La línea conceptual que las separa es delgada dado que el proceso para encontrar la señal en medio del ruido es muy exigente. Las claves para entender dicha distinción pueden estar en dos conceptos claves: consciencia y propósito. El primero se refiere a si quienes comparten la noticia falsa son conscientes de lo que hacen y están buscando consecuencias al respecto; el segundo tiene que ver con el motivo por el cual se comparte. Existe un ejemplo de interacción entre ambos conceptos: el portal de humor Actualidad Panamericana, quienes a través de una mezcla entre humor y realidad publican noticias que aparentan ser reales, no obstante su propósito es hacer crítica", explica Andrés Burbano, investigador lider del proyecto. 
 
Para COLEV, las noticias falsas no duran por siempre. De hecho tienen periodos relativamente cortos como portadoras de desinformación. Si se hacen virales presentan un crecimiento exponencial en la cantidad de veces que son compartidas, pero al ser desmentidas igualmente los índices de viralidad bajan rápidamente y usualmente quedan en el pasado. 
 
Una de las conclusiones más importantes, según el grupo de investigación, tiene que ver con el hecho de que todos podemos ser vulnerables ante la desinformación, es decir, 'todos podemos caer en la trampa'. Por lo tanto no se trata de señalar a quienes las comparten o las generan, sino de invitar a un ejercicio de reflexión al respecto e indagar en por qué estamos en permanente busqueda de datos para validar nuestros puntos de vista.

COLEV tiene dentro de sus objetivos producir y comunicar evidencia pertinente sobre las medidas de salud pública para abordar los desafíos relacionados con COVID-19 en Colombia.

Clic AQUÍ para conocer el visualizador “Un año de noticias falsas en Colombia”

Fuentes: Colombia check, Colombia check método, La Silla Vacía, La Silla Vacía método, Código fuente, Dataset. 
Referencias. OMS and disinformation, INS, Actualidad Panamericana.
Créditos: COLEV - Museo de la Desinformación. La pieza fue desarrollada por el equipo de la maestría en diseño de la Universidad de los Andes: Ángela Mora, Isabela Ortiz, Camila Padilla y Andrés Burbano. 
“Un año de noticias falsas” no trabaja con datos personales.