09/04/2018

Zombis, de la ficción a la realidad por las drogas sintéticas

Una cuchara con cápsulas y pastillas

Análisis de Ricardo Peña, profesor de Medicina de la Universidad de los Andes, sobre las llamadas ‘drogas zombi’ o ‘drogas sintéticas’.

Drogas 'zombi': cómo se identifican, qué contienen, cuáles son sus efectos. Análisis.
Por: Ricardo A. Peña Silva 
M.D., Ph.D. en Farmacología
Director de investigaciones
y profesor de la Facultad de Medicina
Universidad de los Andes

 
En la literatura de ficción y en películas se encuentra la descripción de seres humanos que divagan sin sentido, caminan lento y sus movimientos son torpes o muy agitados. Su lenguaje no es claro, parecen no tener conciencia de lo que hacen e incluso pueden llegar a causar daño a otros. Estas 'personas' son llamadas zombis y su padecimiento ha sido atribuido a magia, infecciones, radiación u otros fenómenos. Se ven en películas como El retorno de los muertos vivientes o la serie The Walking Dead, entre otras. 

En los últimos años, sin embargo, los zombis han pasado de la ficción a ser personas reales que han aparecido en los medios de comunicación, generalmente, causando daño físico y temor a la comunidad. Estos zombis de la vida real no son producto de la magia, sino que están asociados al abuso de sustancias llamadas popularmente drogas zombi, conocidas técnicamente como drogas sintéticas. 

Los episodios más famosos muestran a imagen de personas que estaban agitadas, atacaron y se comieron partes del cuerpo de otros sujetos luego de exponerse a Flakka (droga zombi), en el estado de la Florida en los Estados Unidos. EN Colombia también han aparecido reportes, y recientemente se conoció acerca de fiestas en la región cafetera en las que participaron jóvenes que desarrollaron comportamientos erráticos y descontrolados luego de exponerse a drogas zombi.

Los procesos de síntesis y distribución de estas drogas no son controlados y esto hace que sea muy difícil identificar la sustancia responsable de la intoxicación y predecir los efectos de estas drogas en el organismo. Generalmente, estas drogas fueron diseñadas en laboratorios científicos serios como herramientas para estudiar el efecto de distintos neurotransmisores en las neuronas y el sistema nervioso central. Sin embargo, la disponibilidad de los métodos de síntesis en literatura científica permitió que otras personas sintetizaran esos compuestos de manera menos controlada y en ambientes más artesanales. 

Para saltar barreras de seguridad, estas drogas sintéticas son mezcladas con productos vegetales (generalmente inertes) y son ofrecidos como 'inciensos' para fumar o para utilizar en pipas tipo hookah. Algunas de estas sustancias también pueden ser administradas por medio de inyecciones. 

La droga zombie y sus niveles de adicción 


Las drogas zombi tienen un gran potencial de generar adicción y pueden causar intoxicaciones severas debido a la variabilidad en el contenido de la droga y por la alta potencia de estos compuestos. Por ejemplo, un cannabinoide sintético con el nombre del rifle de asalto AK-47 y que contiene la molécula AMB-FUBINACA puede ser hasta 200 veces más potente que la marihuana común. Esto quiere decir que se requiere una dosis extremadamente baja de AMB FUBINACA para lograr efectos similares a los de la marihuana en el sistema nervioso central. 

Las drogas sintéticas actúan en el sistema nervioso y se dividen en varios grupos incluyendo: estimulantes similares a la catinona que reciben el nombre popular de 'sales de baño' (Flakka), opioides sintéticos similares a la morfina (Krokodil) y cannabinoides sintéticos (AK-47).

Los estimulantes generalmente son alcaloides derivados de plantas como la Catha edulis o son moleculas similares al MDMA (éxtasis). Estos aumentan los niveles de neurotransmisores como la dopamina y la norepinefrina en el sistema nervioso central y sus efectos en el organismo son similares a los reportados con el uso de éxtasis, anfetaminas y cocaína. Los efectos incluyen sensación de euforia, agitación psicomotora, convulsiones, paranoia, alucinaciones y ataques de ira. Durante el episodio de intoxicación con estos estimulantes los sujetos pueden destruir objetos a su alrededor o causar daño a personas cercanas. Adicionalmente, aquellas personas que consumen estas drogas pueden presentar trastornos severos en el corazón, los músculos y el riñón, que podrían llevar a la muerte.

Los cannabinoides sintéticos actúan de forma similar a la marihuana. Ellos, en general, deprimen las funciones del sistema nervioso. Estas sustancias pueden causar una distorsión de la percepción de la realidad. En algunas personas los síntomas psicóticos han durado hasta cinco meses. Estos cannabinoides también tienen efectos adversos severos que incluyen crisis de ansiedad - que pueden terminar en suicidios-, convulsiones, hipertensión, daño renal y problemas del corazón -que terminan en infartos y muerte-. 

Debido a la variedad de la drogas zombie y de las dosis a las que se pueden exponer las personas, es un reto para el personal de salud hacer un adecuado manejo de las emergencias clínicas y confirmar con certeza la causa de la intoxicación. El tratamiento de la intoxicación por estas sustancias se enfoca en el control de las complicaciones que tenga el paciente. Muchos sujetos, luego de la exposición a estas sustancias, son manejados en unidades de cuidado intensivo.

El bajo costo de producción de estas drogas sintéticas, sumado al poco control y seguimiento que se puede hacer sobre su producción y distribución, hacen que el uso de drogas zombi este emergiendo como un importante problema de salud pública.
 

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