24/08/2017

Video: La agricultura familiar y la sustitución de cultivos ilícitos en Orinoquia

manos cultivando
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La firma en noviembre del año pasado del Acuerdo de paz por parte del Gobierno Nacional y las FARC, dejó en evidencia la necesidad de abordar un tema crítico como es el problema de las drogas ilícitas y su impacto, a la población urbana y rural.

Este es un tema que debe abordarse desde todos los eslabones de la cadena, es decir, desde el productor hasta el consumidor; situación que plantea desde ya un reto mayor, estudiar las estrategias diferenciadas que deben implementarse en cada uno de estos eslabones.

Un tema que suscita especial atención por parte de los pobladores en las regiones que han sido históricamente afectada de manera simultánea por la violencia y el narcotráfico, es el de los cultivos de uso ilícito. El Acuerdo, justamente, reconoce que “la persistencia de los cultivos está ligada en parte a la existencia de condiciones de pobreza, marginalidad, débil presencia institucional, además de la existencia de organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico”. La Orinoquia es una región donde confluyen diferentes problemáticas.

Para abrir un espacio de participación sobre esta situación, el Centro de Estudios de la Orinoquia (CEO) de la Universidad de los Andes, en alianza con la Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá y la Red Nacional de Agricultura Familiar y Sustitución de Cultivos Ilícitos, organizaron el Conversatorio “Agricultura familiar y sustitución de cultivos ilícitos”, el 24 de agosto en la Universidad de los Andes.

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